La cuarta edición del festival más innovador, de la plataforma para la creación y exhibición escénica contemporánea, comienza el próximo viernes 3 de julio. Y lo hace estrenando nombre, de Fringe pasa a Frinje, con j. Un homenaje a la sencillez 'juanramoniana', un guiño a la particular y reconocible pronunciación con la que el público de la metrópoli lo nombra. Del 3 al 25 de julio, organizado un año más por el Teatro Español, Frinje15 volverá a agitar la escena madrileña. Danzad malditos, de Alberto Velasco, inaugura el festival.

Por delante, tres semanas de artes escénicas, laboratorios y experiencias singulares que convierten Matadero Madrid en epicentro de la creación y el pensamiento contemporáneos. La propuesta de Danzad malditos reproduce aquellos maratones de la época de la Gran Depresión en Estados Unidos, en los que parejas bailaban de manera continuada hasta la extenuación. También el viernes, el dúo Single ofrecerá un concierto gratuito en la Plaza Matadero aunando el dub y el reggae para convertirlo en pop.

Cambio de nombre, cambio de rumbo
Con la sustitución de Fringe por Frinje llega también un cambio de rumbo en el que los procesos creativos y la reflexión sobre la escena conviven y se entrelazan con la exhibición, reivindicando un diálogo activo entre creadores y espectadores, entre realidades y utopías (o distopías) y entre vanguardia y tradición.

En este contexto, Frinje15 reduce el número de espectáculos, apuesta por la calidad y aumenta su implicación en los procesos creativos con laboratorios, seminarios, talleres, lecturas dramatizadas, actividades para niños, vermús literarios y mesas redondas.

Los 31 proyectos seleccionados -procedentes de Francia, Inglaterra, Marruecos, Argentina, Bélgica, Corea, Polonia y España- recibirán este año un importe que duplica al de ediciones anteriores. Durante 23 días Matadero Madrid se convierte en vivero de la creación emergente. El festival cumple cuatro años y se consolida como una plataforma para nuevos creadores de distintos lugares del mundo. A la convocatoria abierta el pasado mes de febrero se presentaron 570 proyectos de compañías de Italia, Francia, Holanda, Inglaterra, Marruecos, Argentina, México, Colombia, Chile, Uruguay, Brasil, Bélgica, Palestina, Israel, Costa Rica, Corea, Finlandia, Polonia y España.

Huyendo de las etiquetas al uso y en sintonía con una actualidad intensa y desafiante, el festival propone nuevos enfoques artísticos en los que englobar a las propuestas de este año: La actualidad a escena, Creación en grupo, Cuerpos en movimiento, Otros enfoques y Experiencias singulares.

Las entradas oscilan entre los 5 y los 12 euros, mientras que los talleres para niños, los conciertos en Plaza Matadero, las actividades audiovisuales y los vermús literarios son gratuitos.