La nueva directora artística del Teatro Español, Natalia Menéndez, elige al reconocido artista para llevar a cabo la fusión con las Naves del Matadero

Luis Luque, nuevo director adjunto del Teatro Español y las Naves del Matadero

Luis Luqu

El Teatro Español, bajo la dirección de Natalia Menéndez, contará como director adjunto con Luis Luque. El director de escena, candidato al Premio Valle-Inclán por La cantante calva, acompañará a Menéndez en la fusión del Teatro Español y las Naves del Matadero. A lo largo de su carrera, Luque ha triunfado con montajes como El señor Ye ama los dragones, que fue nominada a cuatro premios MAX; Fedra, estrenada en el Festival de Mérida; y El Pequeño Poni, un título montado en países como Argentina, China o Alemania.

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y la delegada del Área de Cultura, Turismo y Deportes, Andrea Levy, presentarán al nuevo equipo directivo y su nuevo proyecto el próximo viernes en el Teatro Español.

Luis Luque inició su carrera como actor en la escuela de Jacques Lecoq y se formó en la dirección de escena junto a dos mitos como Miguel Narros y el escenógrafo Andrea D’Odorico, de quienes aprendió el ​rigor y el compromiso por el oficio y el cuidado en la plástica y los detalles en escena. Además, colaboró con Carlos Saura, Salva Bolta y la propia Natalia Menéndez, de quien ha sido ayudante de dirección hasta en siete ocasiones en montajes como Las Cuñadas, de Michel Tremblay, o Realidad, de Tom Stoppard.

El nuevo director adjunto debutó en el teatro independiente con No digas que fue un sueño (Sala Triángulo, 2000), ha dirigido casi una veintena de montajes que han pasado por los principales escenarios españoles (del Centro Dramático Nacional al Festival​ Internacional de Teatro Clásico de Mérida, incluyendo el Teatre Romea o el Teatro Arriaga), en los que ha colaborado estrechamente con la nueva ola de la dramaturgia contemporánea española, Alberto Conejero, Jose Padilla o Paco Bezerra. Con este último, ganador del Premio Nacional de Literatura Dramática, forma un sólido tándem teatral, en el que han colaborado en siete títulos, entre los que se incluyen La escuela de la desobediencia, Ahora empiezan las vacaciones, Dentro de la tierra, El pequeño poni o Fedra.

Además, Luis Luque es un gran conocedor del teatro de repertorio, puesto que ha trabajado con libretos de Ionesco (La cantante calva), Gogol (Diario de un loco) o Racine (Alejandro Magno).

En su dilatada trayectoria, Luque ha frecuentado por igual el territorio off de la capital, en donde ha estrenado en lugares añorados como La casa de la portera o el Festival Frinje, como los grandes escenarios madrileños. De hecho, Luque había estrenado como director en el Teatro Español La cantante calva y en el Matadero, El diario de un loco El señor Ye ama los dragones, una exitosa comedia escrita también por Paco Bezerra, que  recibió cuatro candidaturas a los premios MAX.

Escenarios de excepción
Junto a Natalia Menéndez, el director de escena deberá llevar a cabo la fusión del Teatro Español y sus naves. El Área de Cultura, Turismo y Deportes ha decidido fusionar de nuevo ambos centros ante la demanda de gran parte de la profesión escénica y del público madrileño que reclamaban que el teatro de texto regresara al complejo cultural de Legazpi.

Sumando ambos espacios, el Teatro Español podrá desarrollar diferentes líneas de programación que satisfagan las necesidades y gustos de la ciudadanía. Tradición y vanguardia se darán la mano en este renovado Teatro Español, que atenderá a las diferentes disciplinas artísticas (teatro, danza, circo, música).

La Nave 10 y  la  Nave 11 del Matadero, así como la Nave 12, que acoge la cafetería y un pequeño escenario, se crearon precisamente como una prolongación del Teatro Español en las instalaciones de Legazpi y fueron inauguradas por Mario Gas en 2007.

En total, las Naves del Matadero disponen de 5.900 m2 distribuidos en tres edificios que permiten una gran flexibilidad gracias a que el graderío, la escena y la maquinaria teatral han sido diseñadas de forma que el espacio admita múltiples configuraciones, desde espectáculos teatrales convencionales hasta propuestas escénicas más arriesgadas.

La Nave 10 cuenta con un vestíbulo que se emplea como espacio expositivo y que da paso a la Sala Max Aub con capacidad para 269 espectadores. En este edificio también se encuentran la Sala de Madera y la Sala de Hormigón, dos espacios multifuncionales donde se imparten talleres y se exhiben piezas de creación. En cuanto a la Nave 11, denominada sala Fernando Arrabal, es la que mayor capacidad tiene, con un aforo para 449 personas.

Con estos espacios, el Teatro Español, el escenario más antiguo de la ciudad con 400 años de historia teatral, recuperará una mayor capacidad para programar y gran parte del presupuesto que perdió cuando en 2017 se decidió crear el Centro Internacional de Artes Vivas. El objetivo del Ayuntamiento es que el Teatro Español vuelva a ser uno de los buques insignia de las artes escénicas en España. /